lunes, 17 de enero de 2011

Soy

Cuan infinito fue el camino a tus labios
y cuan lejano se ven hoy, tiempos lejanos.
que he de hacer
si hoy me derrito en tus brazos,
si es implacable tu manera de mantenerme
fuera de mí y dentro tuyo.
Sos como el pétalo al viento
que vuela para luego caer sobre mi frente,
y que lo tomo y lo llevo a mis labios
y no lo dejo nunca mas.
Soy como el sol a lo lejos
lejos, inalcanzable para todos,
pero te abrigo, te abarco
nos abarcamos
somos.


Fuí,
el velero errante,
concha de mar llevada a las olas,
llevado a la voluntad del azar.
Soy,
tu aroma,
de tu esencia existo,
soy eso que tus poros expulsan,
soy ese lunar en tu vientre,
te estoy marcado, 
permanentemente,
soy y seré.


Te lo he dicho mil veces,
que deberiamos dejar ya la tierra,
que volar no nos queda mal,
al fin, eso hacemos en nuestros viajes mentales,
eso es lo que anhela el cuerpo,
sentir el calor de la piel que llora tumultos de agua,
que se enrojece al tacto de la lengua,
que se estimula, se rompe en triangulos de colores,
se intercala entre ser y desvanecer,
se incorpora y se deshace.


Siento que te abrazo,
y me anexo a tí, 
que no somos nada
y somos parte de un todo
y el todo es tu y yo,
hechos ceniza solida,
hechos de la misma piedra,
el uno para el otro,
mientras tu abrazo total me asfixia,
no me deja pensar,
porque no se necesita.


Porque...


Te lo he dicho mil veces,
que contigo soy completo,
soy,
y seré,
no dejes que me aleje,
porque no pienso hacerlo nunca.
Si fuéramos el viento y aliento
nos mezclaríamos perfectamente,
recorreríamos el mundo juntos,
entre arenas y grandes mares,
veriamos morir el sol a nuestros pies, 
y seguiríamos el camino.


Soy,
solo soy eso
no soy más.
No soy más y lo repito
solo soy.
Pero,
hoy eso basta,
Y te basto y me bastas,
somos simétricos,
hechos a la medida,
el encaje de nuestros pechos,
la figura exacta de tu cintura
ajustada a la mia,
y a mis brazos.
Nos bastamos,
y nos basta.